Homenaje a las tortas (fragmento)
1. Doxología
Bajo el ojo de Zeuscuyas pestañas secas son el desierto,
la tierra plana, geografía redonda,
la pisada vegetal, árbol sediento de raíces—,
a veces y todas las veces, nos paseamos
en búsqueda de voces, a la caza de palabras
a escondidas, cobardes,
por los gritos violentos del que sufre y el viento del Sur
que trepida más abusador que la falsa filantropía.
Bajo ese sol, que es vida,
se seca la voz del relámpago
y en la arena nace la piel de escaramuza,
el dolor en camuflaje:
¡nace la hambruna etíope,
la biafrana desolación que duele muchos siglos
de carabelas y hostias, defecadas
por ganas de morir en Somalia o Bangladesh!
Bajo ese ojo de Zeus
—la esperanza de Osiris—,
en vano esperamos la muerte
del postrer enemigo, la hambrienta Muerte,
el hambre asesina del Aniquilador.
¡Siquiera ya esperamos que la lluvia nos sepulte
con el bautismo de energía!
¡A nadie que cierre las pestañas secas
o la boca tragapolvo
con espacio visible por los muertos en vida!
¡Ya ni esperamos que se nos tolere
un poco de locura ni que se nos perdone
la urgencia de matar la arena y la tierra plana
y su geografía redonda!
¡Ya ni preguntamos
—fascinados por espejismos—
cuándo bajará la espada de la eutaxia
a las grietas del alma avergonzada,
dónde nacerá el enemigo de la perra culebra,
la flaca vermífuga, chupasangre, el Prometido!
Saben que lo mataríamos, sí, al menos, al herir
su cabeza, para así cerrar el túnel por donde exhala
el polvo, evasîo de ruina y tormento.
¿Cómo matar la perra hambre,
con puro sentimiento hecho palabra,
si no desciende el trigo de los cielos
ni luz del rayo de las sílfides, cuyos senos prometen
leche de estrellas lejanas?
¿Cómo surtir de «pan de nobles» al ziggurat
de las fosas del Ática, si somos el enorme báratro
cargado de excrementos y moscas y cuerpos tristes?
Carlos A. López Dzur es un poeta hispano caribeño, residente en California. Es candidato doctoral en
Filosofía y Letras. Obtuvo el Premio del Certamen Literario Chicano de UCI, Irvine.