ORACIÓN POSTMODERNA
¿A donde se ha ido el fuego señor,
con sus horas perdidas
y sus horas buscadas?
Si el tiempo de la contemplación
se ha diluido
en la santa lucidez
que nos habita,
si ya lo padecimos todo
y hasta nos sobrevivimos
a nuestros afanes vanguardistas.
¿Sería este el momento propicio
para dar la espalda
con los ojos abiertos,
y recibir la comunión con la nada
sin la vidriosa retina del insomne?
Líbranos señor de un acto bochornoso,
de la conversión a la sospecha
del error inevitable
de la mirada fija
y del corazón itinerante.
Plántanos como amapolas
al margen de la razón.
Marjorie Eljach. Profesional en estudios literarios, Universidad Javeriana. Coordinadora de literatura, Fundación Estudios Culturales "La Bacanería"